Hoy a la mañana el Departamento de Trabajo de EE.UU. publicó, como es rutina, la tasa de desempleo para mayo, bajo muchas expectativas de números muy feos dado que la cuarentena había puesto el freno de manos en la economía y la pérdida de empleo se había normalizado.
La sorpresa se vislumbró en Wall Street, que esperaba que la tasa de empleo suba hasta un 20%. El número real fue tan solo del 13,3%, marcando un descenso del 14,5% del mes, en vez de un ascenso estrepitoso como auguraban los economistas de izquierda.
Cuando abrió el mercado y se publicaron los datos, los principales índices bursátiles reaccionaron de manera muy positiva. El Dow Jones Industrial Average que venía tambaleando, terminaría ganando 800 puntos en una sola rueda.
La sorpresa también vino del mismo presidente Donald Trump, que a través de Twitter festejaría el alentador número y lo describiría como un “gran reporte”. Sin lugar a dudas, la economía que creó Trump es una de las más sólidas de la historia, capaz de sobrevivir inclusive un shock como la pandemia de coronavirus.
La caída del desempleo se traduce en que Estados Unidos está volviendo a trabajar. Con pocas regulaciones, pocos impuestos, y una gran capacidad instalada, muchas personas que perdiendo su trabajo lo recuperaron en menos de 1 mes.
El aumento de mayo fue, por mucho, el mayor aumento de empleos de un mes en la historia de los Estados Unidos desde al menos 1939. El único mes anterior que registró más de un millón de empleos fue septiembre de 1983, con 1,1 millones. Esta vez 2,5 millones de personas volvieron a trabajar de un mes para el otro.
Cabe tener en cuenta que, a pesar de que los medios quieren vender una imagen negativa del presidente Trump para con la comunidad afroamericana, la tasa para los hombres afroamericanos cayó del 16,1% al 15,5%. El descenso más grande de la historia dentro de esta comunidad.
Mostrando que, aunque el Partido Demócrata diga que es el único que puede proteger a los afroamericanos, quien les está dando las oportunidades para trabajar, ganar dinero, y cumplir sus proyectos de vida es el Partido Republicano.
El siguiente gráfico explica perfectamente la realidad norteamericana. Trump había asumido en un contexto de bajo desempleo pero que se estaba estancando. Los últimos números de la gestión Obama daban caídas del desempleo cercanas al 0%.
En tan solo 3 años la economía trumpista creó la plataforma para que el sector privado prospere, y Estados Unidos llegó al pleno empleo alrededor de 2018, agarrando una tasa del 5% y bajandola hasta mínimos de 3,2%
(Hay que tener en cuenta que por razones puramente estadísticas siempre va a existir un “desempleo natural”, que simplemente mide la cantidad de gente que está cambiando de trabajo cuando se hacen las mediciones. Por eso para niveles de desempleo cercanos al 3%, se considera que la economía está en pleno empleo)
En marzo llegó el coronavirus a EE.UU. e hizo estragos. Gobernadores de todo el país se apresuraron a cerrar la economía mientras el Congreso, controlado por los demócratas, todavía estaba discutiendo los planes de reactivación del gobierno. En este ínterin, miles de empresas en todo el país tuvieron que suspender sus servicios y echaron personal.
Así el desempleo para abril se disparó al récord histórico de 14,7%. Pero mientras todos los “especialistas” auguraban por lo menos 2 meses más de subida, con un mayo al 20% de desempleo y un junio al 25%, la realidad fue muy distinta.
Mayo ya indicó que a pesar de la cuarentena, la gente está volviendo a trabajar, y el número bajó a 13,3%. Ahora, las estimaciones indican que para junio el desempleo será menor al 10%, menos de la mitad de lo que decían hace 24 horas.
Moraleja: no todos los “especialistas” saben de lo que hablan.

Desempleo mensual desde 1950.
Fuente: Bureau of Labour Statistics.
“Parece que las empresas comenzaron a contratar trabajadores antes y en mayor cantidad de lo esperado, una tendencia que probablemente continuará a medida que los bloqueos disminuyan en todo el país”, dijo Eric Winograd, economista senior de AllianceBernstein
Los impresionantes avances se producen solo tres meses después de que EE.UU. contará con una tasa de desempleo del 3.5%, la más baja en 50 años
Por último, para los lectores argentinos cabe destacar que ayer el gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof dijo que “en EE.UU. se perdieron 40 millones de empleos durante la cuarentena”.
Esta afirmación ignora completamente la realidad. Los datos oficiales publicados esta mañana muestran que la caída hasta mayo fue menos de la mitad, 19,6 millones, de lo que dijo el gobernador.
Una vez mas se puede observar como Estados Unidos se libera del virus, y se libera de las consecuencias económicas del mismo. Se demuestra el alto nivel de asertividad que tuvieron las medidas del gobierno republicano.
Usted debe estar conectado para publicar un comentario Inicio de sesión