Bayern Munich demostró toda su superioridad y le ganó sin pasar demasiados sustos al Olympique de Lyon por 3 a 0 en esta segunda semifinal de la UEFA Champions League. El doblete de Gnabry -figura indiscutible del cotejo- y el broche de oro del goleador Lewandowski le dan el pase a la final para enfrentar al París Saint Germain (que eliminó por el mismo resultado al Leipzig).
El comienzo del juego en el estadio José Avalade, ambos elencos comenzaron a medir sus habilidades, y en este estilo general, el Lyon comenzó a sobreponerse. Con buena y efectiva presión a los 4 minutos, Thiago lanza mal un pase que cae en los pies del equipo francés, que en un toque logra dejar solo a Memphis Depay con Manuel Neuer. Sin embargo, con una perfecta espera del portero, el holandés trata gambetarlo erróneamente y termina desviándose demasiado hacia la derecha; cuando busca definir, no tenía ángulo y por eso el balón se estrella en la red, pero en la parte de afuera.
El Bayern tratando de reaccionar tuvo su oportunidad de la mano de Leon Goretzka y Robert Lewandowski, que realizaron una pared que deje vía libre para que el alemán defina, aunque lo hizo muy mordido. No obstante, el mal remate permitió darle más peligro a la jugada, obligando a Anthony Lopes a arrojarse para subsiguientemente lanzarla al tiro de esquina.
La superioridad del elenco francés comenzaba a marcarse cada vez más. Tenía superioridad en número y en calidad en esos entonces. A los 13′, dos centros desviados por Jérôme Boateng valieron oro, ya que si el alemán no lo hacía, ahora estaríamos trancribiendo el gol del Lyon.
Diecisiete minutos. Contra rápida para el Lyon. Karl Toko Ekambi corre con campo libre por delante, mientras que por la otra punta esperaba solo Depay a la espera de un centro de rastrón, aunque una mal zancada del camerunés atrasó su corrida, permitiendo la vuelta de los defensores rivales. A pesar de ello, Ekambi siguió con el balón, viendo el paronama recortó hacia el medio, definiendo al primer palo ante el achique de Neur, y el balón se estrella en el palo.
Como dicen: los goles que no haces en un arco, lo recibís en el otro. Y así fue para Lyon. 18′, pelotazo (pase) largo del lateral Joshua Kimmich para el extremo Serge Gnabry. El alemán recorta para el medio, ayudado por los desmarques de sus compañeros, consigue seguir avanzando; entonces, ve el momento y con un zurdazo define al ángulo convirtiendo el 1-0 del partido el favor del elenco alemán.
Después del primer gol, la superioridad del combinado francés se desvaneció totalmente y entró en un dilema de no saber que hacer con el marcador en contra. A los 25 minutos, en un error defensivo, Gnabry toma el balón y define con un zurdazo, pero Lopes logra atajar y evitar el segundo; 5 minutos más adelante, una pared de Lewandowski e Ivan Peresic, terminando en definición del polaco pero nuevamente la detiene el arquero portugués.
Luego de avisar en varias oportunidades, el Bayern Munich se pone en ventaja por 2 a 0: Gnabry toma el balón en la altura de la medialuna del área, observando el panorama ante la marca un tanto endeble del Lyon, se la abre a Peresic que se hallaba en la punta izquierda del área grande; el croata rápidamente envía un centro pasado por debajo a Robert Lewandowski; sorprendentemente el goleador se traba y no pudo definir perfectamente, aunque de la nada pudo impactar el balón, que termina atajando Lopes; sin embargo, aparece tras el rebote dado por el portero, el autor del primer gol, que ahora se convierte en el del segundo tanto, Gnabry.
La figura de esta primera parte, Gnabry, recorta para el medio desde la punta izquierda y remata-tira centro a los 37′. Terminó siendo ni uno ni otro. Ni centro para Lewandowski que no llegó a empujarla, ni tiro al arco, porque el balón se fue desviado, aunque muy cercano al segundo palo. Con esta marcada diferencia en favor del equipo alemán, ya sea en el resultado como en el juego, se va la primera parte a los 45 minutos clavados según decisión del árbitro Antonio Miguel Mateu Lahoz.
Homologando el final del primer tiempo, arranca la etapa complementaria. El Bayern Múnich seguía mostrando su superioridad ante un Lyon inconcluso e inconciliable para la formación de juego, ante una situación apremiante. Bajo esta perspectiva, Peresic pudo engrosar el marcador a los 51 minutos, pero marca demasiado su remate y Lopes lee sus movimientos corporales, adivinando hacia donde iba el balón atajándolo finalmente.
Más avanzado el segundo tiempo, el Lyon dejó su forma inorgánica, organizándose y dando vida a un nuevo equipo. El Bayern ayudó a forma lo susodicho, porque bajó su nivel de juego que nos acostumbró minutos atrás. En primer lugar, un tiro deveniente de un saque esquina del sector derecho, llega la cabeza de Marcelo y este hace efectivo el remate, pero Manuel Neuer estaba bien parado en el área chica y contuvo la pelota; en segundo de lugar, a los 58′ llega la más clara del Lyon en los pies de Ekambi, tras un gran pase de Houssem Aouar, pero el camerunés se apretado y presionado estupenda salida del arquero Neuer, quién frena el remate estupendamente con sus pies.
Avanzada la segunda parte, el partido se desdibujó completamente como entendiendo o dando a entender ambos elencos que el final era inmodificable. Solo restaba esperar que el Bayern estire la ventaja, como lo hizo a los 79′ tras un gol de Philippe Coutinho pero se anuló porque estaba claramente en offside.
En el tramo final, con el pasaje ya asegurado para el Bayern Munich, llega el tercer gol para dicho elenco. En un centro de Kimmich del sector derecho (por un tiro libre), la envía a la altura del punto de penal donde aparece la cabeza de Lewandowski (cuando no) y anota el 3 a 0 final.
Sin sobresaltos, Bayern Munich jugará su décima final de la UEFA Champions League y buscará alzar su sexto título. Por su parte, el Lyon realizó un estupendo certamen que acabó con un monstruo futbolístico como lo es el equipo alemán que no lo dejó competir en todo el encuentro.
Usted debe estar conectado para publicar un comentario Inicio de sesión